La Rosa de Bayahibe: Una Flor Nacional poco conocida

Es realmente de gran hermosura  y tiene su origen exclusivo en nuestro país:  Nos estamos refiriendo a la Rosa de Bayahíbe, la que en el 2011 fue declarada mediante la Ley 146-11, como la Flor Nacional de la República Dominicana.

Esta planta fue descubierta por el botánico Alain Liogier, en 1977 y la bautizó como pereskia quisqueyana, en honor a Quisqueya, que era el nombre que los taínos le daban a la Isla Española.

 Se encuentra exclusivamente en las proximidades del poblado de Bayahíbe, en la región Este del país.

Confieso que supe de su existencia y de la distinción que ostenta, hace poco tiempo, mediante un cartel y un afiche, colocados en nuestra redacción, promoción bellamente impresa por el Jardín Botánico Nacional, Florida International University, Ministerio de Medio Ambiente y Ministerio de Educación Superior, Ciencia y Tecnología.

Y la pregunta que me hago es: Si yo, que soy periodista, no conocía hasta hace pocos días, de la existencia de la Rosa de Bayahíbe, como Flor Nacional de nuestro país, ¿Qué no será de la mayoría de la población dominicana?,  que tiene centrada su atención y preocupación por la situación de inseguridad que vivimos, por los “benditos” apagones y por los altos precios de los comestibles, antes que cualquier otra cosa.

Creemos que si los organismos correspondientes  escogieron esta rosa, como Flor Nacional, (y ojalá den a conocer los mecanismos y procedimientos que se usaron para ello), ellos mismos deben implementar una campaña para que el país conozca de su existencia y de la distinción que ostenta.

Sí recuerdo que años atrás, varios especies muy conocidas en las diferentes regiones del país, como: La Trinitaria, Flor de la Caoba y Cayena, entre otras, estuvieron como firmes candidatas, o que quizás alguna de ellas, obtuvo la categoría de Flor Nacional. Y nadie puede negar que las tres especies  son muy conocidas y abundan por todo el país.

Pero tenemos a la Rosa de Bayahíbe como Flor Nacional desde hace dos años   y eso tenemos que aceptarlo, aunque no la conozcamos mucho, y aunque tengamos que ir a Bayahibe para apreciar su hermosura.

NAPOLEON BERAS PRATS