Cuatrocientos cuarenta y siete haitianos apresados por la Marina de Guerra en tres meses y quince días llegaron a pagar en dolares la suma equivalente de 74 millones, 655 mil pesos, a bandas de compatriotas de ellos y criollos para intentar llevarlos a Puerto Rico en diferentes embarcaciones.
Los datos fueron obtenidos por este medio de testimonios ofrecidos por los propios haitianos, hombres y mujeres de diferentes edades, a oficiales de la Dirección de Inteligencia Naval, organismo que ha practicado las detenciones y frustración de los viajes ilegales a Puerto Rico.
Los haitianos apresados tratando de viajar ilegalmente a Puerto Rico en yola declararon que laboraban en fincas recolectando y sembrando productos diversos, en ingenios cortando caña y en construcciones de proyectos habitacionales, siendo conquistados por compatriotas y dominicanos.
Dijeron que los traficantes de ilegales, no solo de haitianos, sino de cubanos y dominicanos, poseen y tienen alquilados dormitorios, viviendas en fincas y hoteles que operan mayormente en zonas rurales, donde son llevados los frustrados viajeros hasta el día que partirían hacia dicha isla.
Afirmaron que incluso los grupos cobran primero el 50 por ciento de la suma acordada con la persona que vaya a viajar para, supuestamente, construir las embarcaciones para transportarlos a Puerto Rico, dotarlas de los equipos necesarios, incluyendo motores fuera de borda de 40 y 60 caballos de fuerza.
La mayoría de los apresamientos de haitianos, en algunos casos navegando hacia Puerto Rico, saliendo o abordando yolas, fueron realizados por miembros de la Dirección de Inteligencia Naval en las zonas de La Romana, Higüey, Miches, Sabana de la Mar, los puntos más utilizados por los traficantes de ilegales.
Se reveló que las bandas de traficantes de ilegales conquistan a los extranjeros vendiéndoles el sueño de que tan pronto lleguen a Puerto Rico recibirían todas las facilidades de las autoridades boricuas para obtener sus documentos legales, lo que ha motivado la avalancha de haitianos tratando de viajar a la isla.
Por otra parte, el jefe de la Marina, vicealmirante Edwin Dominici Rosario, ordenó a la Dirección de Inteligencia M-2 de la institución a no detener los operativos para impedir la salida de yolas en viajes ilegales.
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