La muerte del hijo menor de Muamar Gadafi, Saif al Arab, y de tres de sus nietos en un bombardeo de la OTAN en Trípoli ha disparado la tensión en Libia y ha reavivado las críticas, dentro y fuera del país, contra la intervención militar de la Alianza Atlántica.
La televisión estatal libia mostró imágenes de manifestantes en Trípoli que portaban retratos de Al Arab y gritaban consignas contra "los países occidentales asesinos". Mientras, los residentes de Misurata aseguraban que los ataques de las tropas leales al régimen se habían intensificado tras conocerse las muertes. Un portavoz rebelde confirmó el recrudecimiento de la ofensiva gadafista y denunció que habían atacado el puerto cuando un barco con ayuda humanitaria estaba descargando su mercancía.
No hay comentarios:
Publicar un comentario