Al parecer para atracarlo, sus verdugos le hicieron tres balazos, dos de ellos en la cabeza y otro en su hombro derecho, dejándolo moribundo en la carretera que va a la Otra Banda.
Fue encontrado en la agonía de la muerte por conductores que transitan la citada vía y llevado al hospital Nuestra Señora de La Altagracia, en Higüey, donde pereció minutos más tarde.
Tras su asesinato su cadáver fue llevado al Instituto de Ciencias Forenses, en el hospital Antonio Musa, de San Pedro de Macorís, donde se practicó una necropsia al cadáver.
Llegó a jugar básket para el equipo Las Mercedes, cuyos dirigentes valoraron a la víctima como excepcional y de un temperamento ecuánime.
Su cadáver está siendo velado en funeraria San Antonio, instalada por el senador Rubén Darío Cruz (Rubén Toyota).
Será sepultado mañana en el cementerio municipal de Hato Mayor.
Con relación al hecho, las autoridades policiales de Higüey, no tienen a nadie detenido.
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